El socialista Julio Nieto vende humo cuando pide la provincia
El PSOE debe prometer la nueva estructura administrativa en su programa electoral en vez de abrir debates tras los comicios
Fuegos de artificio. El candidato a alcalde por el PSOE, Julio Nieto, vende humo en el momento que reivindica la restitución de la provincia de Cartagena pero sólo después de las elecciones y si las gana. Si el alcaldable del Partido Socialista quiere que los cartageneros le tomen en serio, basta con que su formación a nivel regional, el PSRM- PSOE, contemple en su próximo programa electoral la creación de la nueva figura administrativa. “Abrir debates para después de las elecciones y que luego en Murcia nos digan que no, es una historia tan repetida que aburre y, lo que es peor, hacer promesas a sabiendas de la incapacidad de cumplirlas, es jugar con los sentimientos de muchos cartageneros”, asevera el secretario general y candidato a alcalde por el Partido Cantonal, Celestino García Alfaro.
El concejal socialista Julio Nieto sabe bien que, a día de hoy, el comité regional de su partido mantiene una postura negativa a la creación de la provincia de Cartagena. Y, al respecto, o deja claro que el PSRM ha abandonado esta postura gracias a su gestión o, en cambio, evidencia la indignidad de aquel que vierte compromisos con la certeza de su falsedad.
El Partido Cantonal ya pidió la creación de la provincia de Cartagena durante la alcaldía de Antonio Vallejo Alberola. En aquel momento, el secretario general socialista y presidente de la Comunidad Autónoma, Carlos Collado Mena, hizo absolutos oídos sordos a la propuesta y despreció sin contemplaciones la reivindicación histórica de la Comarca. Por su parte, el Partido Popular, con su presidente local, Francisco Celdrán, y su secretaria general y alcaldesa, Pilar Barreiro, ya casi veinte años en el poder, cada dos por tres niegan cualquier interés de su formación en la nueva estructura administrativa con excusas falsas como el aumento de funcionarios, ya que serían enajenados del actual cuerpo de trabajadores públicos de la Comunidad Autónoma, o que la población carece de “sentimiento provincialista”, cuando los estudios demoscópicos anuncian todo lo contrario.
